“Yo me llamo Érika, tengo 18 años y estoy en grado 11 en la Institución Educativa Luis Orjuela de Zipaquirá. Mi vida antes de conocer el Programa de Educación para la Sexualidad y Construcción de la Ciudadanía –PESCC- era otra cosa. Mejor dicho, yo no tenía un proyecto de vida. Pero conocí el proyecto hace tres años y mi actitud empezó a ser mejor, ahora puedo tomar decisiones responsables acerca de mi vida”.
Que los adolescentes conozcan e incorporen en su vida cotidiana los Derechos Humanos, que tengan la capacidad de tomar decisiones informadas sobre su vida y su sexualidad, que desarrollen el pensamiento crítico y participen en la vida social como ciudadanos/as empoderados y autónomos, son parte de los objetivos centrales del Programa de Educación para la Sexualidad y Construcción de Ciudadanía –PESCC-, implementado en Colombia desde el 2008 por el Ministerio de Educación Nacional.
Ángela Rosales, Directora Nacional de Aldeas infantiles SOS Colombia, señaló que de la capacidad que tenga la familia para enseñarles a los niños y a las niñas acerca de sus derechos, se pueden prevenir muchas situaciones lamentables, “Al niño hay que creerle, prestarle atención, protegerlo y formarlo para la prevención”.
Datos del Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses revelan que cada hora, aproximadamente dos niños o niñas fueron víctimas de este delito, en la mayoría de los casos por un integrante de su familia y en su propia vivienda. Este mismo Instituto admite que no recibe sino el 30% de la verdadera ocurrencia.
La Institución Luis Orjuela, ubicada en el municipio de Zipaquirá, a una hora y media de Bogotá, alberga a más de 1000 estudiantes, que reciben los contenidos del Programa desde el año_2008. Doris Ayala, su rectora y orientadora, reafirma el compromiso de la escuela con la formación de sus alumnos en sexualidad y derechos humanos: “Si se aprende el respeto por sí mismo, podemos empezar a hablar de los otros, porque no se trata únicamente de relaciones sexuales, sino también de convivencia y de construcción de ciudadanía”.
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